En un escueto comunicado de prensa, El Obispado de San Felipe informa a la comunidad que recientemente se recibió una denuncia en contra del sacerdote Mauricio Cruz Lolas, por mala administración y gestión de los recursos durante el período que fue Párroco de San Esteban, por lo que se realizó una investigación previa.
En virtud de lo anteriormente expuesto, luego de haber discernido la situación y de escuchar al Consejo de Gobierno, se ha ordenado el inicio de un Proceso Administrativo Penal, de manera que se pueda resolver si tales acusaciones son ciertas o no.
Como medida preventiva se ha determinado el cese en oficio de párroco de Santa Rosa de Los Andes del sacerdote Mauricio Cruz Lolas, mientras dure el proceso. No obstante, no tiene restricciones en el ejercicio del ministerio.
Durante el periodo que dure dicho proceso el presbítero Omar Orellana Manríquez asumirá como administrador de la Parroquia Santa Rosa, con la colaboración del sacerdote Armando Jara Schneider y la cercana atención del Vicario general, Roberto Gilbo CSC.
El administrador apostólico de la diócesis de San Felipe reitero su compromiso con la verdad y la justicia.