La Asociación de Emprendedores de Chile (Asech) frente a la aprobación del proyecto que crea una Pensión Garantizada Universal (PGU) y su financiamiento, levanta la voz en defensa de los emprendedores de las empresas de servicios que se verán perjudicados.
Marcos Rivas, presidente de la Asech explicó que es una muy buena noticia para quienes se van a beneficiar, pero pésima para las MiPyMes de la industria de servicios. “Esto se podría haber financiado con el aumento del impuesto al diésel o aumentando el impuesto a las ganancias de capital en acciones, pero finalmente nuestros políticos siempre cortan por el hilo más delgado, en este caso los emprendedores”.
El secretario general de la Asech, Juan José Besa, expresó que siempre estarán disponibles para todos los proyectos que vayan en beneficio y apoyo de las pensiones de todos los chilenos y chilenas, “pero en específico la aprobación de esta ley va por el camino incorrecto desde el punto de vista del emprendimiento y del fortalecimiento de las políticas públicas orientadas al ecosistema emprendedor. Como Asech estamos en contra de la eliminación de la exención que afectará a muchos emprendedores del sector servicios que se encuentran en una situación muy desmejorada”.
Para el gremio es impensado que en momentos tan complejos para el emprendimiento y la crisis que la pandemia ha causado, agregar un gravamen de IVA al sector servicios. “Desde nuestra perspectiva, es una contradicción inexcusable cuando queremos la recuperación económica de esos sectores y fortalecer los segmentos de mipymes de nuestra economía. Es una política discriminadora para los prestadores de servicio, ya que ellos proveen un servicio que se desarrolla en base a su capacidad intelectual, el que no puede descargar el IVA como lo hacen otras industrias productivas como retail o manufactura y, por ende, no posee IVA crédito en el proceso productivo”, explicó Rivas.
Para el gremio emprendedor lo esperable hubiese sido que tanto el gobierno como los parlamentarios hubiesen considerado las indicaciones que hizo la Asech cuando asisitó al Congreso a exponer su posición con un análisis profundo de impacto de la eliminación de esta exención en la industria de servicios, proponiendo en dicho análisis una sana afectación de las grandes industrias y no del mundo pyme, donde claramente se concentran los prestadores de servicios impactas negativamente con esta propuesta.
Por otra parte, Besa explicó que algo muy importante a considerar es que “las empresas de servicios no cuentan con una estructura tributaria que pueda mitigar los efectos del pago de IVA del mismo modo que aquellas dedicadas al comercio de tangibles. Muchas de ellas no podrían recuperar lo pagado y terminarán los proveedores pequeños financiando el flujo del pago de impuesto. Y por otro lado, aumentarán los costos para los consumidores debido a la afectación del IVA en el cobro del servicio. Es más, las pymes serán menos competitivas en comparación con las grandes empresas porque el 19% más de IVA solo puede ser incorporado en precio por un proveedor más grande”.
“Lamentamos profundamente que una vez más el impacto regulatorio que una ley ejerce sobre las pymes haya sido invisible tanto para el Ejecutivo como para el legislativo y peor aún, no formó parte de la ecuación en el Congreso al despachar esta ley”, finalizó Rivas.
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