La Municipalidad de San Felipe, a través de recursos de emergencia, dispuso de 10 millones de pesos para el cambio del motoreductor eléctrico del biodisco que permite la operación de la planta de tratamiento de aguas servidas de Algarrobal, estimándose que en una semana más vuelva a funcionar con normalidad.
Debido al costo que tiene esta reparación, la cooperativa del sector aportó aproximadamente 3 millones de pesos para cubrir el valor total que implica el cambio de la pieza.
Con esta solución se pretende terminar con los malos olores generados a causa de la falla del motoreductor eléctrico, situación que afectó -principalmente- a los vecinos que viven cerca de la planta.
El alcalde (s) Patricio González sostuvo que esto es parte de un trabajo desarrollado en coordinación con la directiva de la cooperativa, “además forma parte de la preocupación permanente que existe hacia este sector”.
“Siempre somos parte de la solución, eso es lo que nos tiene contento que aportamos para dar una respuesta concreta al problema que se presentó”, comentó.
Ingrid Henríquez, gerente de la Cooperativa Algarrobal, sostuvo que era una tremenda complicación mantener la planta detenida y, por esa razón, se solicitó el apoyo del municipio para obtener los recursos que permitieran su reparación.
“Las obras comenzaron el viernes, esta semana, esperamos avanzar y así dar respuesta al problema presentado, sobre todo porque son los vecinos quienes deben soportar los malos olores, confiamos que a la brevedad ya esté superado”, sostuvo.
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