En un contexto de creciente preocupación, la comunidad educativa de la Universidad de Valparaíso se enfrenta a una serie de graves denuncias relacionadas con el maltrato en los campos clínicos. Las recientes declaraciones de Marta Inzunza Muñoz, madre del estudiante de medicina Pablo Leiva Inzunza, quien tristemente falleció el pasado viernes, han encendido una luz sobre el sufrimiento que enfrentan los futuros profesionales de la salud.
Marta Inzunza ha expuesto cómo el ambiente opresivo y el maltrato sistemático por parte de algunos doctores en campos clínicos contribuyeron al deterioro de la salud mental de su hijo, quien estaba a punto de terminar su formación. La denuncia de Inzunza ha revelado que este no es un caso aislado, sino parte de un patrón preocupante que afecta a muchos estudiantes.
Además de esta denuncia, hemos recibido otras quejas graves desde distintos sectores. Una apoderada de una alumna de la carrera de Enfermería en San Felipe ha informado que su hija y sus compañeros están siendo acosados por docentes durante las prácticas e internados, lo que ha llevado a varios estudiantes a abandonar la carrera. Según la apoderada, el miedo a represalias ha llevado a su hija a no revelar su identidad ni su curso, por temor a ser reprochada en su último internado.
La situación se agrava con la reciente medida de la Universidad de Valparaíso de otorgar solo dos días de descanso en lugar de una semana completa para los estudiantes, lo que ha llevado a algunos a considerar irse a paro.
Otra apoderada también ha reportado que su hija, actualmente hospitalizada debido a un cuadro complejo de salud, ha sido víctima de presiones extremas durante los procesos de exámenes, describiendo la experiencia como una verdadera tortura.
Es fundamental que la comunidad universitaria y las autoridades correspondientes tomen medidas inmediatas para abordar y resolver estas denuncias. La salud mental y el bienestar de los estudiantes deben ser una prioridad, y es imperativo que se garantice un entorno de respeto y apoyo durante su formación profesional.
Las denuncias están siendo tratadas con la máxima seriedad, y se mantendrá la reserva de los nombres de los denunciantes para proteger su privacidad y seguridad.
NOTA DE NUESTRA REDACCION: ESTAMOS A LA ESPERA DE ALGUNA REACCION DE LA CASA DE ESTUDIOS