El 14 de noviembre se celebra el día mundial de la diabetes, por lo tanto, como profesional de salud resulta importante generar conciencia en la comunidad sobre la enfermedad, cómo prevenirla, el impacto que provoca en la salud de las personas y hablar de sus aspectos más relevantes, debido a que cada año se produce un aumento de las personas con esta enfermedad.
1.- Hablando a grandes rasgos ¿Qué es la diabetes?
En primer lugar, la diabetes es una enfermedad crónica, que quiere decir que es de larga duración. Para entender cómo funciona, es importante mencionar que nosotros al consumir distintos alimentos aportamos al organismo azúcar, tambien llamada glucosa, por el cual, el páncreas, órgano que se encuentra horizontalmente detrás del estómago, produce una hormona llamada insulina, que funciona como una llave que ayuda a las células del cuerpo a absorber el azúcar de los alimentos transformándola en energía. De esta forma, una persona diabética, no va a producir la cantidad suficiente de insulina o ésta no puede ser usada adecuadamente para producir energía a partir del azúcar en nuestra sangre, generando que el azúcar se acumule y permanezca circulando en el organismo y con el tiempo sin tener un tratamiento adecuado puede llegar a producir distintos problemas de salud.
Existen distintos tipos de diabetes, pero la que mayormente se encuentra en la población es la diabetes tipo 2, esta se origina cuando no se produce la insulina necesaria en el organismo o la insulina no se usa adecuadamente.
2.- ¿Cuáles son los factores que aumentan la probabilidad de presentar diabetes en las personas?
Existen distintos factores asociados a la presencia de diabetes, entre ellos encontramos, antecedentes familiares, debido a que el riesgo aumenta si padre, madre o hermano/a tiene diabetes; la edad, ya que la probabilidad aumenta a mayor edad; los estilos de vida desfavorables cumple un papel importante, como alimentación rica en azúcar y grasas, no realizar actividad física y fumar; sobrepeso u obesidad; presentar otras enfermedades, como hipertensión arterial, dislipidemia, que es cuando nuestros niveles de colesterol están aumentados en la sangre, y antecedente de diabetes gestacional en el embarazo, por último, factores ambientales, principalmente el estrés.
3.- ¿Existen algunas conductas que nos ayuden a prevenir desarrollar diabetes en el futuro?
En la diabetes tipo 2 aunque exista un antecedente familiar que aumente la probabilidad de padecer la enfermedad, se puede retrasar su aparición mediante estilos de vidas favorables, por ejemplo, comiendo alimentos saludables, esto quiere decir, con menor contenidos de grasas y calorías, evitar bebidas azucaradas, prefiriendo el consumo de frutas, verduras, carnes, comidas con menor contenido de azúcar y sal, y el consumo de agua entre 2-3 lts diarios. Además, realizar actividad física al menos 3 veces a la semana de 30 minutos cada actividad, o también, realizar caminatas rápidas diarias o andar en bicicleta. De esta forma, nos mantenemos en un peso saludable, evitando el sobrepeso u obesidad. Reducir otros hábitos no saludables, como fumar y abuso del alcohol.
4.- ¿Cómo las personas se dan cuenta que tienen diabetes?
Muchas personas pueden tener esta enfermedad por mucho tiempo sin presentar los síntomas habituales, por lo que es muy importante realizarse chequeos constantemente, ya que en el caso de detectar alguna anormalidad se puede tratar prontamente la enfermedad. En el caso de presentar los síntomas clásicos, estos son: sentir aumento de la sed, necesidad de orinar frecuentemente durante el día y la noche, sentir mucha hambre y pérdida de peso inexplicable. Además, puede ir acompañado de visión borrosa, fatiga, náuseas, vómitos, dolor de cabeza e infecciones frecuentes.
5.- ¿Es muy complicado el tratamiento que tienen que hacer los diabéticos?
Muchos pacientes piensan que desde que se diagnostica la enfermedad, no podrán comer ningún alimento, en realidad las personas diabéticas deben comer constantemente durante el día en pequeñas cantidades, el desayuno, almuerzo, once y colaciones entre las comidas. Estos alimentos deben ser saludables, basado en frutas, verduras, carnes, legumbres, cereales, restringiendo el consumo de pan, sal, comida chatarra, azucaradas y preferir consumo de agua. Agregando la actividad física constante en la semana. Muchas veces solo estas medidas ayudan a mantener los niveles de azúcar en la sangre.
El tratamiento farmacológico se incorpora cuando la dieta saludable y actividad física no son suficientes para regular el azúcar en la sangre. Y en caso de no mantener un buen control de la enfermedad también puede ser necesario inyectarse insulina.
Para ayudar en la adherencia del tratamiento tanto farmacológico como no farmacológico, la familia o círculo cercano del diabético cumple un papel fundamental en este, porque el impacto que genera el cambio del estilo de vida es importante y resulta necesario el apoyo constante de la familia durante el proceso de adaptación de nuevos hábitos saludables y para ello es esencial que la familia también conozca la enfermedad e interioricen sus aspectos más relevantes, así también, realizar un cambio en los estilos de vida saludables en el interior del hogar, dificultando en menor cantidad la adherencia a dieta principalmente.
En general, las personas necesitan realizar un equilibrio entre la dieta, ejercicio físico, el tratamiento farmacológico y vigilancia constante de los niveles de azúcar en la sangre, para evitar problemas típicos de la enfermedad.
6.- ¿Alguna recomendación para el tratamiento farmacológico?
Es muy importante que, se mantenga un horario establecido para tomar los medicamentos, no saltarse dosis o cambiar los horarios previamente establecidos y es esencial que en caso de sentirse mal al tomar el medicamento consulte con médico y no deje de tomarlo por su cuenta.
En cuanto a la insulina, es fundamental que se inyecte las unidades indicadas por el médico, porque se pueden generar complicaciones importantes. Además, el uso y conservación de la insulina es algo que deben saber muy bien los diabéticos, entre estas podemos recalcar: no exponer al sol y nunca congelar, se debe almacenar dentro del refrigerador en uno de sus compartimientos; en caso de trasladar la insulina se debe llevar en cooler o bolsas térmicas con una unidad refrigerante; observar siempre aspecto de la insulina, si tiene un color no habitual, es mejor no utilizar.
7.- ¿Cuáles son las complicaciones más frecuentes que se pueden ver en las personas diabéticas?
Uno de los problemas más frecuentes que ocurre es la hipoglicemia, es decir, cuando el azúcar en la sangre baja de los valores normales, esto puede ocurrir por periodos largos de ayuno, actividad física excesiva, dosis elevadas de insulina o los mismos medicamentos orales. Es importante que los diabéticos conozcan la sintomatología de esta complicación y cómo actuar ante ella. La azúcar disminuida en la sangre va a generar sudoración excesiva y fría, temblores, palpitaciones, hambre excesiva, mareos, somnolencia, dolor de cabeza y visión borrosa. Para tratarla se recomienda ingerir de inmediato, siempre y cuando la persona este consciente, jugos de frutas, agua con 3 cucharaditas de azúcar o un dulce para aumentar el azúcar en la sangre lo más rápido posible.
Tambien existen otras complicaciones que aparecen a lo largo de los años cuando no se tiene un adecuado control de la enfermedad, estas son infartos al corazón, accidentes cerebrovasculares, disminución de la circulación de la sangre a las extremidades inferiores, lesiones oculares que pueden desembocar en ceguera, lesiones renales que acaban en insuficiencia renal y alteraciones en los nervios produciendo una menor sensibilidad especialmente en los pies, que pueden desarrollar pie diabético, que es cuando se originan heridas en los pies y que a veces en necesario amputar debido a la presencia de infecciones graves.
8.- ¿Existen algunas medidas que ayuden a no generar estas complicaciones?
Para evitar el desarrollo de las complicaciones diabéticas, se debe tener un control frecuente de la enfermedad, siendo consistente con los controles de salud correspondientes, realización de exámenes de sangre y complementarios, evaluación y cuidado constante de los pies, sumando a esto, los estilos de vida saludables. De esta forma, se puede detectar oportunamente una complicación de la diabetes, iniciar tratamiento rápidamente y dar las recomendaciones pertinentes para evitar el agravamiento.
9.- ¿Qué recomendaciones les daría a las personas diabéticas para el cuidado de los pies y así evitar una herida?
El autocuidado de los pies por parte de los diabéticos es primordial para evitar una herida, por ende, constantemente se deben observar y evaluar la presencia de alguna anormalidad, para ello se deben adoptar ciertos cuidados para los pies.
Se recomienda:
- Lavarlos diariamente con agua tibia y jabón neutro, no con agua muy caliente por el riesgo de quemadura ni con agua muy fría porque dificulta en mayor cantidad la circulación sanguínea a los pies.
- Secarlos con una toalla suave sin olvidar entre los dedos evitando que queden húmedos porque se puede desarrollar hongos, el secado es con toques sobre la piel no frotar ni secarlos con secador.
- Cortar o limar las uñas de forma recta no circular, para evitar que la uña se encarne, no cortar si tiene mala vista.
- Lubricarlos frecuentemente con crema, pero no entre los dedos.
- Cubrir con calcetines, pero estos no deben quedar apretados ni tener agujeros, si es el caso se recomienda eliminarlos y no coserlo porque la costura puede generar una herida.
- Utilizar zapatos cómodos, suaves, de horma ancha, suela gruesa y punta redonda, con el objetivo que no oprima los dedos y permita el movimiento dentro de este. Comprarlos preferentemente durante la tarde.
- Revisar los zapatos siempre antes de usarlos, evitar uso de sandalias y zapatos de tacón alto.
- No usar guateros y evitar ponerlos cerca de estufa.
- No caminar descalzo
- Consultar a un podólogo al menos una vez al año.