Bajo estrictas medidas de distanciamiento social y sanitizaciones periódicas en los espacios utilizados por sus jugadores, el club deportivo Unión San Felipe retomó sus entrenamientos en el complejo deportivo del sector de Parrasía.
Dicha medida fue adoptada por la institución a partir del jueves pasado, cuando luego de las capacitaciones necesarias a sus miembros, decidieran retomar la preparación física presencial en el campus.
De esta manera, el club acogió el otorgamiento de permisos especiales por parte del Ministerio de Salud y coordinados por Deporte, para que el fútbol y deportistas de alto rendimiento regresaran a entrenar, previo cumplimiento de protocolos preventivos ante COVID-19.
Todo esto implicó sin duda un cambio de conducta al interior de la organización y el recinto deportivo, lo que incluyó una planificación previa sobre la cual se refirió Eduardo Olivares, Gerente General Unión San Felipe. “Todo este cambio lo hemos hecho con entusiasmo. Hemos cumplido absolutamente tanto con los protocolos de la autoridad de salud, como los que nos hemos autoimpuesto, que son incluso más exigentes. Estamos dispuestos a hacer el esfuerzo que sea, con tal de garantizar primero que todo la seguridad de nuestros jugadores, cuerpo técnico y administrativo; como también tratar de volver lo antes posible a la competición normal, por eso lejos de ser una molestia a una imposición, todo esto ha sido para nosotros algo que hemos hecho con cariño”, reconoció.
Sin embargo, la Seremi del Deporte, Ruth Olivera, puso énfasis en la responsabilidad que tiene cada jugador de respetar las medidas de autocuidado y así ir avanzando para retomar el fútbol. “Hay que ser claros, porque a pesar de todos los esfuerzos que estén haciendo los clubes, siempre la responsabilidad mayor es la individual, por lo que cada uno tiene también que cuidarse, ser responsable cuando vuelven a su domicilio. Esta visita ha sido bastante buena, la preocupación hacia los deportistas me tiene bastante tranquila”.