La ministra del Interior, Carolina Tohá, y el general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, asistieron esta mañana al funeral de los carabineros que murieron tras la persecución de Calle Larga.
Ambos fueron ascendidos póstumamente.

En la Iglesia Santa Rosa, se llevó a cabo la misa fúnebre del suboficial mayor Alejandro Guerrero y del suboficial mayor Raúl Villegas, funcionarios policiales que perdieron la vida la madrugada del lunes tras un operativo que surgió luego que un conductor huyera de una fiscalización en San Felipe.


El conductor, quien tenía antecedentes por conducir en estado de ebriedad, también murió y otras tres personas resultaron lesionadas: el sargento Manuel Cáceres Saavedra y dos mujeres que iban al interior del automóvil particular.

“Estoy absolutamente indignado, dolido porque este era una persona que llevaba seis detenciones por la misma conducta, una conducta criminal, utilizar un auto como un arma es una conducta criminal y estos carabineros no duraron”, añadió Yáñez.

A la ceremonia religiosa también asistió la ministra del Interior, Carolina Tohá, en representación del gobierno. La autoridad fue recibida entre gritos de personas que se congregaron al exterior de la iglesia para manifestar su apoyo a la institución.
